domingo, 20 de septiembre de 2015

EL ARTE DE FLUIR

La vida es un no parar de momentos, buenos, regulares o malos. Dependerá de tu juicio o tu actitud, y por supuesto de tu arte de fluir con ellos.


Casi seguro que todos conocéis a alguien en vuestras vidas que “no se altera por nada” y que da la sensación de que todo le va bien en la vida. Si es así, lo más seguro es que estáis en presencia de una persona que sabe fluir con su vida.
¿Cómo podemos saber si estamos fluyendo con nuestra vida, o si por  el contrario vamos en contra de ella?

Cuando un líquido fluye significa que está en movimiento, de modo que si sentimos que hay movimiento en el momento, estaremos fluyendo con él. 

Cuando nos ocurre algo inesperado y no deseado, podemos resistirnos a lo que está ocurriendo, quejándonos de lo que ha ocurrido, haciéndonos las víctimas o buscando culpables, o bien podemos fluir con lo ocurrido, aceptando primero nuestros sentimientos de ira, impotencia, nerviosismo, etc…, y a continuación decidiendo el siguiente paso a tomar teniendo en cuenta las nuevas circunstancias.
Las emociones no dejan de ser respuestas químicas de nuestro cuerpo ante un estímulo, por lo que si dejamos que nuestro cuerpo fluya, la emoción desaparecerá.

“Fluir no significa pasarlo bien o disfrutar, sino navegar sin resistencia, adaptando el curso y la actitud a las condiciones externas que no controlamos”. 

Esta falta de resistencia es la que hace que el camino sea más agradable.


No estamos fluyendo cuando: tenemos sentimientos de frustración, enfado, envidia, celos, o tenemos la sensación de que todo es difícil, o que requiere mucho esfuerzo. (Si le tienes que poner demasiado esfuerzo, es posible que estés yendo contracorriente).
Estamos fluyendo cuando: tenemos la sensación de que la situación es fácil, nos sentimos serenos, tranquilos, entusiasmados, alegres, confiados, aceptamos lo que sucede y nos responsabilizamos de cambiarlo cuando no es lo que queremos.

¿Cuáles son las cualidades, o habilidades, que nos ayudan a fluir de manera natural con la vida?

Flexibilidad emocional.  Es algo que podemos aprender de los niños, pues son unos verdaderos expertos, pasan de la peor rabieta a la carcajada más grande en décimas de segundo. Aprender a reconocer, aceptar y sentir nuestras emociones es clave para que estás fluyan con naturalidad, en vez de resistirlas y hacer que se queden con nosotros más tiempo del necesario.   


Presencia. Vivir el momento presente, aquí y ahora, evitando juicios y centrándonos en crear movimiento en la dirección deseada.
AceptaciónDeja cualquier resistencia, esquiva, evita, si te sientes mal, o a disgusto o quizás nervioso, entonces no estás aceptando la situación o el momento. Acéptarlo es el primer paso para poder hacer algo.
·   Ocuparse, y no preocuparse. Si estás a disgusto en una situación responsabilízate de tu emoción y haz lo que sea necesario para cambiarla.
    Actitud de apoyo.  Encuentra una buena actitud o forma de ver la situación presente, que te pueda ayudar, a sacarle el máximo provecho de cualquier circunstancia o adbersidad. Si te cuesta encontrarla, siempre puedes mirarlo desde el prisma del aprendizaje. Cada momento nos puede servir para aprender algo.

EL ARTE DE FLUIR POR LA VIDA, ES LA HABILIDAD DE DEJAR ATRÁS LO QUE PERTENECE AL PASADO, ABRIRNOS A LO NUEVO Y A LO DIFERENTE. ESTAR PRESENTE "AQUI Y  AHORA", SABIENDO VIVIR SIN JUICIOS, CON ACEPTACIÓN Y RESPONSABILIDAD.
Te invito a que veas el vídeo donde hablo de todo lo que te he explicado. Espero que te guste, por favor, si quieres, déjalo fluir compartiendolo en tus redes sociales y así llegue a cuando más personas mucho mejor. Muchas gracias hasta el prósimo spot.




Suscribete a este blog: charo amate blog spot.
Twiter: charocharm
Facebook: Charo Amate Coaching
Canal You tube: CHARO AMATE



No hay comentarios:

Publicar un comentario