Somos físicamente igual a como actuamos ante la vida. Por lo tanto solamente me queda decirte que actúes bien. No te sientas aludido si tienes algún problema físico, ya sea por naturaleza o accidental, no va por aquí. Lo que quiero explicarte es bien distínto. El tema de hoy me refiero al tiempo y la huella que deja en nuestro físico, hablo concretamente en nuestra piel de la cara. Hoy te explico la hipótesis del Feedblack facial.
Hipótesis del Feedback Facial, fue elaborada primeramente por Silvan Tomkins. Básicamente vinculaba los movimientos
musculares de la cara con la generación de emociones. Es decir, que además de sonreír cuando nos sentimos felices, "La emoción provoca el gesto". El hecho de generar
e incluso "forzar" una sonrisa aún no sintiendo inicialmente una
emoción positiva, hará que nos sintamos mejor.
Por supuesto, lo mismo pasa con las emociones y los "caretos"
negativos: fruncir entrecejo, curvar labios hacia abajo... fomentan que
acabemos enfadados o tristes. Parece ser que el uso consciente de nuestros
músculos faciales influyen en cómo nos sentimos.
Y lo que es igual de importante: por extensión, afectamos a cómo se sienten aquellos que
nos están mirando.
¿El precio de tanto derroche de felicidad?
Más arrugas nasogenianas (conocidas como
"arrugas de la risa") y aumento de las patas de gallo.
Contrastando esta información, el
científico Andreas Hennenlotter de la Universidad de Múnich, ha hecho
experimentos inyectando botox en el rostro de algunos voluntarios. ¿Queréis saber sus
conclusiones?
El bótox cambia la forma en que el cerebro humano responde a las
situaciones emocionales. Es decir, no solo paraliza los músculos, sino que
también te "bloquea" el cerebro.
Descubierto todo esto, ahí va mi consejo: si alguien está decidido a inyectarse botox,
mejor que lo haga, bueno, quizás solamente en el entrecejo, por aquello de bloquear el cabreo y el
mal rollo, que a veces tenemos.
Por lo tanto, dejemos nuestras patas de gallo en paz; mejor aún, pongámoslas de moda. Como dijo el diseñador de moda Adolfo Dominguez, con sus trajes de lino, "La arruga es bella". Os invito a marcar un poquito más, a potenciarlas.
Por lo tanto, dejemos nuestras patas de gallo en paz; mejor aún, pongámoslas de moda. Como dijo el diseñador de moda Adolfo Dominguez, con sus trajes de lino, "La arruga es bella". Os invito a marcar un poquito más, a potenciarlas.
Suscribete a este blog: charo amate blog spot.
Twiter: charocharm
Facebook: Charo Amate Coaching
Canal You tube: CHARO AMATE
Twiter: charocharm
Facebook: Charo Amate Coaching
Canal You tube: CHARO AMATE
Hola! Me gustó mucho tu entrada, pero además me hizo reflexionar sobre eso que muchos odian: las Arrugas. Yo tengo algunas patitas de gallo, yy Mr sentía muy mal cuando un amigo mío(si es que se le puede llamar así) me miraba examinando mi cara y decía: te estás arrugando mucho. Me sentía fatal!! Pero ahora amaré más a mis patitas de gallo. Gracias y saludos.
ResponderEliminarHola! Me gustó mucho tu entrada, pero además me hizo reflexionar sobre eso que muchos odian: las Arrugas. Yo tengo algunas patitas de gallo, yy Mr sentía muy mal cuando un amigo mío(si es que se le puede llamar así) me miraba examinando mi cara y decía: te estás arrugando mucho. Me sentía fatal!! Pero ahora amaré más a mis patitas de gallo. Gracias y saludos.
ResponderEliminar